En el mundo existen personas, en cada persona existe un mundo; detrás
de ese mundo de esa persona existen diferentes formas de ver las cosas, las
perspectivas cambian dependiendo de la vida de cada individuo. Existen momentos
en nuestro camino en los cuales encontramos diferentes rutas que seguir, en ese
momento no sabemos por qué ruta seguir, no sabemos cuál es la mejor opción, la confusión
nos abruma, el terror nos invade y el miedo nos paraliza por completo, queremos
correr pero no sabemos hacia donde, pensamos y pensamos por que la decisión correcta
ya no abra vuelta a tras será el destino el único que se compadezca de nosotros si nuestra elección fuese
errada. Los cambios nos dan incertidumbre por el futuro pero esa es la base de
la vida la cual debemos aprender a afrontar, en algunas ocasiones estaremos
solos y tendremos que pasar a un nuevo capítulo sin la ayuda de nadie y lidiar con lo que se venga con nuestras
propias manos.
jueves, 19 de abril de 2012
domingo, 15 de abril de 2012
Establecemos reglas para los demás y excepciones para nosotros"
La superioridad nos hace pensar que somos
bueno, más que buenos que somos perfectos dioses los cuales merecen ser
venerados por los demás, gran error que cometemos tan a menudo que no nos damos
cuenta de ello; por ese mismo sentimiento de superioridad es que queremos que
los demás también sean perfectos o al menos ese tipo de perfección que
imaginamos con reglas, perjuicios, condiciones que buscamos pero que en
realidad esas normas son los defectos que cargamos y eso son justamente los que
más criticamos de las personas por nuestra inseguridades.
Un dicho común dice “no
digas nunca de esa agua no beberé” pues serás el primero en hacerlo. Pensamos y
pensamos en que aremos si… pero llegado el momento cometemos error tras error
por haber pensado de más de lo debido, por haber aconsejado a un amigo más de
lo necesario, por haber advertido a alguien más de lo que realmente uno mismo necesitaba…
simplemente el problema nace cuando pensamos en lo que deberán hacer los demás pues
confiamos que a nosotros jamás nos pasara
y si en el remoto caso llegase a pasar simplemente sabremos cómo manejarlo y si
no, como ya dije, nos creemos dioses para los cuales sus decisiones son 100%
correctas a pesar de que sea el error más obvio y claro de todos.
Suscribirse a:
Comentarios (Atom)